Don Quijote y Sancho Panza, Batman y Robin, Sherlock Holmes y su querido Watson. Tanto en la literatura como en el cine, tenemos numerosos ejemplos de esta dupla perfectamente equilibrada formada por un líder y su fiel seguidor.

En este post vamos a valorar el rol que juega el seguidor en cuanto a su relación con el líder y el porqué es tan importante que exista la figura del seguidor para que un líder tenga éxito. Un líder nunca será tal si no tiene un equipo que le siga y le respalde. De igual manera, un líder difícilmente alcance el éxito si carece de esta figura tan importante en su vida, que no es otra que la del seguidor.

Líder y Seguidor… el equilibrio perfecto

Comencemos valorando cuáles son los rasgos que identifican a un buen seguidor:

• Fidelidad. Es el rasgo principal de todo seguidor. Sin duda alguna, se trata de un rasgo fundamental pues la relación entre líder y seguidor se forjará a través de los años. De las vivencias que hayan acometido juntos. De permanecer cerca el uno del otro, tanto en los momentos de éxito como en los de fracaso. Y para que todo esto ocurra, debe existir un vínculo transcendental entre ambos que sólo se comprende si el seguidor se ha mantenido fiel al líder
• Tiene los pies en la tierra. Un líder suele ser una persona con una alta capacidad de visión centrada en el futuro. Esto, en repetidas ocasiones, puede llevar al líder a un exceso de ensoñación, es decir, de idealizar dicho futuro en exceso. Es por ello que la figura del seguidor será la que permita al líder bajar a veces al mundo real. Esto sonará altamente familiar a aquellos que se hayan leído las historias de Don Quijote de la Mancha y de su fiel seguidor Sancho Panza, quien continuamente traduce las ensoñaciones de Don Quijote en algo más terrenal y real
• Pragmatismo. El seguidor, al no ser tan visionario como el líder, necesita de dicho pragmatismo de forma constante. Por otro lado, el líder se beneficiará de esto pues si éste careciese de un mínimo de pragmatismo, sus ideas e ideales quedarían solo en eso, teoría. Y la teoría está genial, pero si no es traducida en algo tangible, de poco servirá.
• Sinceridad. Dice lo que piensa sin temor de represalias. No se guiará por decir lo que se supone que debe decir en cada momento, sino más bien, dirá lo que realmente piensa en todo momento. Esto será de gran ayuda al líder quien constantemente estará rodeado de personas que se sienten intimidadas por la seguridad con la que expresa sus ideas. También por su poder posicional el cual, si bien no tenderá a usar para conseguir aquello que quiere, no dejará de estar presente en la mente de aquellos que le rodean. El seguidor sin embargo, gracias a su relación de confianza con el líder, le dirá a éste, y siempre en privado, aquello que piensa, incluso cuando ello choque de frente con los ideales del líder.
• Integridad. El seguidor es una persona altamente íntegra, al igual que debería serlo el líder al que sigue. Esto le permite tener en mente y en todo momento los límites de lo correcto versus lo incorrecto. Es decir, hará todo aquello que considera bueno tanto para su líder, como para él o ella y siempre sin afectar los intereses de otros individuos.
• Comprensión y Empatía. La compresión y empatía serán sin dudas buenas cualidades del seguidor. Ser líder supone a veces una gran carga y responsabilidad. Es por ello que el seguidor, al estar junto al líder continuamente, compartirá parte de dicha carga, y apoyará al líder en los momentos de flaqueza. Y será principalmente esto, junto con el resto de sus labores junto al líder, lo que convierta al seguidor en su mano derecha, en su persona de confianza, amigo y confidente.

Todo este conjunto de cualidades serán las que permita al líder ser una persona y un profesional equilibrado, resaltándose así el papel tan importante que juega su mano derecha y principal compañero o compañera. De forma simplista, podría prácticamente decirse que uno no es nada sin el otro y alcanzar el éxito profesional pleno sin tener al otro al lado resultaría una tarea prácticamente imposible.

Qué gana el Seguidor en esta relación

Veamos ahora la otra cara de la moneda. Es decir, la del seguidor y de qué gana en esta relación tan estrecha que se genera con el líder al que sigue.

Es cierto que, en algunos ámbitos, la figura del seguidor tiene una connotación negativa, ya que suele asociarse a una actitud pasiva en la vida tanto personal como profesional. Una especie de estar en segundo plano y siempre a la sombra de alguien. Como si estar en segundo plano fuese algo malo.

Al igual que ocurre en las películas y en la vida real, en el plano empresarial no todo funciona gracias a los actores principales o los líderes de dichas organizaciones. En absoluto. De hecho, si una empresa u organización funciona es principalmente a la combinación de buenos líderes, pero, sobre todo, de buenos seguidores que se encuentran comprometidos por la causa.

Veamos ahora 5 puntos que representan qué es lo que ganan los seguidores de toda relación con su o sus líderes. Siempre que dicha relación sea sincera y con el propósito real de que todos ganen, es mucho lo que el seguidor obtendrá de esta relación con el líder.

• Consecución de un propósito común. Tal y como veíamos en un post anterior, el líder se diferencia del manager o jefe gracias a que posee un propósito y una visión. No todas las personas tienen la capacidad de marcar la ruta para la consecución de dichos propósitos, pero no por ello las personas carecen de estos. Tener un líder cerca con el que compartamos el propósito y la visión, y que nos ayude en el camino de cómo conseguirlo y aportar al mismo, resultará de gran ayuda y apoyo para conseguir aquello que el seguidor aspira a conseguir pero que quizás no sepa cómo. Por ello, en este tipo de casos, tanto el líder como el seguidor saldrán ganando en su colaboración.
• Acceso a un Modelo a Seguir. Acabamos de decir que el seguidor contará con el apoyo del líder para conseguir el propósito que comparta con éste. Pero por otro lado, también tendrá cerca una figura que le marcará el modelo de comportamiento y la forma de pensar a la hora de afrontar los distintos retos con los que se encontrará. Suele decirse que los hijos de grandes líderes (siempre y cuando sea su intención) tienen mejores posibilidades que otras personas de ser también grandes líderes. Y esto no es debido a razones genéticas. Es más bien debido a que han visto cerca de ellos y a todas horas, un modelo a seguir que les hará, de forma innata, saber cómo reaccionar a ciertas situaciones concretas.
• Experimentar el crecimiento. Por otro lado, gracias a estar cerca de estos líderes, acelerará su propio crecimiento personal y profesional. Esto es debido a que forma parte de una organización que comparte propósitos, valores, formas de actuar y demás, y esta combinación suele ser un acelerador en cuanto a dicho crecimiento.
• Acelerador en la adquisición de experiencia. Cuando el seguidor siente que está rodeado de las personas correctas con las que comparte los mismos propósitos y objetivos y que se encuentran liderados por la persona o personas correctas, tendrá acceso a una fuente inagotable de conocimiento. Y la experiencia que obtendrá trabajando en dicho grupo será superlativa. Este tipo de enfoque genera un efecto multiplicador claro pues permite acelerar el crecimiento a la vez que permite al seguidor hacer crecer a otras personas con mejor experiencia, pero que aún así, comparten el mismo propósito y visión.
• Seguidor hoy y líder mañana. Una de las características principales de todo líder debe ser la humildad. Esta humildad es la que les permite ser conscientes de que no lo saben todo y que no se espera de ellos que así sea. Cuando eres seguidor, intrínsecamente reconoces no tener las respuestas a todo y de necesitar ayuda para conseguir aquello que te propones. Y esta es la mejor herramienta y entrenamiento para desarrollar este rasgo de humildad que todo líder necesita. Y es este rasgo el que permitirá al seguidor hacer las preguntas correctas cuando quiera aprender algo nuevo, sin miedo al reproche y que le tachen de ignorante. Gracias a esto, muchos personajes en la historia han comenzado como seguidores o aprendices de maestros o líderes que poseían mayores conocimientos. Por poner solo un par de ejemplos, Leonardo da Vinci fue el pupilo de Andrea Verrocchio o Nikola Tesla trabajó para Thomas Alba Edison y gracias a ambos la electricidad es lo que es hoy en día.

Conclusiones

Cualquier líder que aspire a llegar lejos, necesitará de una mano derecha, alguien que le ayude en su propósito, que se honesto con él o ella, que le apoye en los momentos más complicados y le permita no perder conexión con la realidad. La capacidad de soñar e imaginar son claves para cualquier líder, pero si no son capaces de tener los pies en el suelo y ser realistas en todo momento, no alcanzarán el éxito. Y es aquí donde una persona de confianza les ayudará muchísimos en el camino hacia éxito.

La mejor manera de llegar a ser un gran líder el día del mañana es estar cerca hoy de grandes líderes con los que compartas el mismo propósito y visión. De hecho, todos los líderes son, a su vez, férreos seguidores de otros líderes. Es por ello que te recomiendo desarrolles un alto grado de humildad para entender que, independientemente de dónde te encuentres en tu carrera profesional, tengas siempre el interés por aprender algo nuevo de aquellos que conozcan y manejen dicha materia o valores de una forma más avanzada que tú. Permanece cerca de ellos y aprende todo lo que puedas para convertirte tú en un mejor líder.